John Green es un columnista, escritor y bloguero perteneciente a la última hornada de grandes divulgadores educativos que han sabido aprovechar las posibilidades de YouTube al máximo. Junto a su hermano Hank mantiene diversos canales especializados en historia, educación y ciencia, y es un colaborador activo de muchos otros canales. Su faceta de educador la complementa con la de escritor de tal modo que a veces es difícil distinguir dónde termina el educador y empieza el escritor.
En Looking for Alaska, su protagonista Miles Halters nos explica en primera persona su llegada al Instituto preparatorio de Culver Creek. Miles es un muchacho sin amigos, aficionado a leer biografías de autores y personalidades, y le fascinan especialmente las últimas palabras de éstos. Citando las últimas palabras de François Rabelais, "Voy en busca de un Gran Quizás", Miles espera encontrar en la experiencia algo que avive su existencia. Allí trabará amistad con Chip "el Coronel" Martin, su compañero de cuarto, especialista en bromas elaboradas, y Takumi Hikohito, estudiante de descendencia japonesa, quienes le presentarán a Alaska Young, su proveedora de cigarrillos, una muchacha alocada e ingeniosa, de la que Miles se enamora perdidamente. Alaska le muestra las supuestas últimas palabras de Simón Bolívar según la novela El General en su laberinto de Gabriel García Márquez: "¡Cómo saldré yo de este laberinto!". Pero cuanto más trata Miles con Alaska, se va dando cuenta de que la muchacha esconde una faceta de amargura y desesperación que la empujan, su "laberinto". A su vez, Miles se encuentra atrapado en su propio laberinto al saber que Alaska tiene un novio al que ama incondicionalmente, por lo que nunca podrá corresponderle. Poco a poco las vidas de los dos se superponen hasta que un hecho inesperado cambiará a Miles para siempre y amenazará con encerrarlo en lo más profundo del laberinto de su amargura.
Publicada en 2005, Looking for Alaska fue la primera novela de John Green y en ella el autor elabora los temas que persisten en su obra: los cambios en la adolescencia, el amor y el desamor, la soledad, la pérdida, la amistad, la búsqueda de una razón de ser, la muerte y la alegría de vivir. Uno de sus grandes méritos es que el autor no se vale de moralinas ni estereotipos. Green ofrece un acercamiento realista, sin concesiones, sin tabús, a la hora de tratar temas como el despertar sexual en la adolescencia. Y pese al tono agridulce de Looking for Alaska, en sus páginas no hay drama fácil ni angst del que se valen algunos autores juveniles, y el resultado es una obra optimista incluso en la tristeza que se desprende de entre sus páginas.
En uno de sus frecuentes videos, hace poco el autor explicó que empezó a escribir la novela después de sufrir una profunda depresión.
El libro obtuvo el Premio Michael L. Printz otorgado por la Asociación Americana de Bibliotecas y es uno de los títulos frecuentemente recomendados como lectura en los institutos. En España lo publicó Editorial Castillo y está agotado hace tiempo.
Aún siendo etiquetado como un libro para adolescentes, Looking for Alaska es una novela igual de válida para el público adulto. Una obra emotiva, magnífica y muy recomendable.
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